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Como entrenar si estoy lesionado

Cómo entrenar si estoy lesionado

Como a cualquier persona, el estar imposibilitado para realizar las tareas diarias y obligaciones, puede ser un reto muy complicado. Pero más aún, cuando eres un atleta que dedicas mayor parte de tu vida a entrenar, puede ser perjudicial para lograr los objetivos a corto plazo; incluso la pérdida de la rutina del ejercicio físico puede acelerar el deterioro tanto de la salud física como mental del atleta.

Por eso, es indispensable asistir a un profesional de la salud cuando tienes una lesión por muy pequeña que sea. De esta manera, el médico te orientará para diagnosticar que tipo de daño has sufrido, la medicación y terapia que se debe seguir. Siendo así, podrás tomar el camino correcto para seguir entrenando de forma segura.

Cada lesión es diferente, cada cuerpo responde responde de forma única; por ello, como dice el dicho: “escucha a tu cuerpo”. Si tu cuerpo te está informando que no puede realizar un movimiento o te duele mucho al realizarlo, es importante que no lo fuerces porque esto solo va a empeorar la situación.

Preparándose para competir.
Hombre lesionado en la rodilla.
  1. Sigue las indicaciones de tu médico: Si no sigues sus instrucciones al pie de la letra es posible que la lesión cure mal, y en cuanto fuerces el músculo, o la articulación, te vuelvas a hacer daño.

  2. Cuida tu alimentación: La alimentación influye en la recuperación del atleta. Equilibra los alimentos y evita las grasas y azúcares.

  3. Ejercicios isométricos: Estos ejercicios consisten en tensar un músculo y mantenerlo tenso en una posición estática.  Mantén la posición de cada músculo que tenses unos 5-10 segundos y repite al menos 10. Si te haces daño detente y no sigas.

  4. Acude a un fisioterapeuta: El fisioterapeuta puede hacer gimnasia pasiva para evitar la flacidez del músculo cuando tú no seas capaz de moverlo. También los masajes mantienen activa la circulación y nutren los tejidos.

La natación es uno de los deportes preferidos de rehabilitación por su fortalecimiento muscular; el esfuerzo bajo el agua genera mayor resistencia y además es un deporte de bajo impacto (salvo para los atletas elite).

Lesionarse puede generar miedo o frustración y esto es normal, porque es una situación de imprevisto de la cual no estamos preparados. Lo más probable es que tu rutina diaria cambie por completo, pero puedes ir adaptando tu forma de vida sin forzarla a esta nueva circunstancia.

La natación es uno de los deportes preferidos de rehabilitación por su fortalecimiento muscular; el esfuerzo bajo el agua genera mayor resistencia y además es un deporte de bajo impacto (salvo para los atletas elite).

Lesionarse puede generar miedo o frustración y esto es normal, porque es una situación de imprevisto de la cual no estamos preparados. Lo más probable es que tu rutina diaria cambie por completo, pero puedes ir adaptando tu forma de vida sin forzarla a esta nueva circunstancia.

Existen ciertos ejercicios muy beneficiosos para incluir en tu nueva rutina de rehabilitación, esto claro, bajo supervisión de un profesional que esté llevando tu expediente médico.

  • Movilizaciones activas y pasivas.

  • Ejercicios con contracciones isométricas, excéntricas y concéntricas.

  • Ejercicios pliométricos.

  • Ejercicio de propiocepción y equilibrio.

  • Ejercicio de velocidad.

  • Ejercicio de fortalecimiento muscular.

  • Ejercicios de resistencia cardiovascular.

  • Ejercicios de bombeo.

  • Ejercicios de flexibilidad.

Ejercicios de rehabilitación.

El proceso de recuperación puede llevar más tiempo de lo esperado o quizá ser más corto, pero durante ese momento puedes aprovechar para descansar lo suficiente e ir retomando las fuerzas. Este punto es clave para que obtengas resultados positivos en tu salud.

A veces los cambios pueden dar miedo o ser muy difíciles de asimilar, pero parte de nuestra evolución como seres humanos es aprender a adaptarnos a las nuevas circunstancias. Con mucho esfuerzo y dedicación podemos lograr lo que sea.

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